Información básica
(versión para Nintendo Switch)
Goodbye Deponia se lanzó el 23 de diciembre de 2019 y es un juego para un jugador. Se trata de un juego de aventuras. El editor es Daedalic Entertainment. Los modos de juego compatibles son modo TV, modo sobremesa o modo portátil. El tamaño del archivo del juego es de 1,8 GB. Idiomas disponibles: inglés, francés, alemán, italiano, ruso y español.
Contenido del juego
Más caos, más destrucción, más Rufus. No uno, ni dos, sino tres Rufus directos causan el caos en la esperadísima comedia de aventuras Goodbye Deponia. Organon está tramando la destrucción de Deponia, la encantadora Goal ha desaparecido (otra vez) y el antihéroe Rufus no para de meterse en medio. Todo lo que el inventor y espíritu libre Rufus quería era salir del planeta chatarra de Deponia y trasladarse a Elysium, un paraíso que orbita alrededor de Deponia como una nave espacial reservada a las altas esferas de la sociedad. Goal, la antigua chica de Elysium de la que Rufus se enamoró perdidamente, parece seguir siendo la clave de su búsqueda y el ascensor que le llevará al espacio. Rufus ha dado por fin con el plan aparentemente perfecto. Pero, de repente, todo lo que podía salir mal, sale mal. Rufus se encuentra (al principio disfrazado) en un crucero por carretera entre funcionarios de Organon de rostro severo, mientras Goal se pierde. Cuando Rufus tropieza con una máquina de clonación, cree haber encontrado una salida. Se supone que la copia clonada le ayudará a salir de su apuro. Sin embargo, un error „inexplicable“ provoca complicaciones y Goal vuelve a escapar de las garras de nuestro héroe. Ahora tiene tres grandes problemas que resolver: Encontrar de nuevo a Goal, llegar a Elysium y evitar la destrucción de todo el planeta Deponia a manos de Organon. Tres problemas que sólo pueden resolver tres Rufus, por lo que el desventurado inventor decide clonarse a sí mismo. Esto tiene consecuencias insensatas para el jugador: en Goodbye Deponia, el jugador debe a veces controlar a los tres Rufus y utilizarlos para realizar tareas juntos, aunque Rufus tropiece a menudo consigo mismo.
Reseñas
Goodbye Deponia es el tercero de los cuatro juegos de la serie de aventuras gráficas de Daedalic Entertainment. Ya conoces las aventuras gráficas: hablas con los personajes y averiguas pequeños datos, resuelves rompecabezas y recoges objetos de un lugar para usarlos en otro. En los juegos de Deponia, los objetos se pueden combinar en la pantalla de inventario, aunque las combinaciones correctas rara vez tienen sentido lógico, ya que al principio del juego harás un pastel para un amigo y le pondrás cosas como un pastel de orinal. Este tipo de humor de retrete abunda en esta aventura de Deponia. Estarás sujetando a un bebé hasta que se derrame sobre tu amigo, alimentando a tu compañero de celda con todo tipo de artículos de aseo para llamar la atención de los guardias de la prisión y espolvoreando escamas de pescado sobre la túnica del oráculo para hacerle creer que tiene caspa. Es un nivel de humor que da en el blanco la mayoría de las veces, y el estilo artístico se presta muy bien a la vertiente cómica de la obra.
Sin embargo, en lo que más destaca Goodbye Deponia es en el diseño de los puzles, y no necesariamente en los que implican mover objetos de un lado a otro. Lo más destacado de esta entrega es un rompecabezas que implica un laberinto aparentemente interminable. Dado que el protagonista Rufus y su compañero Goal han sido encerrados, todo lo que necesitas para resolverlo es una taza de café muy bien colocada, pero es el tipo de puzle en el que la respuesta te mira a la cara todo el tiempo que intentas resolverlo. A mitad del juego, Rufus descubre que ha sido clonado y dividido en tres versiones diferentes de sí mismo, y en este punto el juego se vuelve un poco más complejo: puedes cambiar entre cada uno de los tres Rufus a voluntad, pero cada uno de ellos está en tres lugares distintos con tres historias distintas que recorrer hasta que finalmente llegan al punto en el que son capaces de contactar y comunicarse entre sí pasándose objetos unos a otros. Todo está muy bien escrito, y aunque narrativamente estas cosas suceden al mismo tiempo, nunca hay una presión añadida que te haga sentirte apurado.
Aparte de algunos puzles fallidos, Goodbye Deponia tiene otro inconveniente, y es el movimiento físico. Si te acercas demasiado a una puerta abierta, puede hacer que Rufus la atraviese y salga de escena cuando tu intención era pasar de largo, y esto se hace cada vez más notable y molesto a lo largo del juego. Aun así, esto se puede pasar por alto: Goodbye Deponia es muy divertido, con algunos puzles ingeniosos, humor e historia. Eso sí, no lo estropees usando la guía.